Tras haber experimentado en clases anteriores como se dibujaba a mano alzada, Ángel nos dijo que llevasemos a clase papel transparente, llamado acetato. En este dibujamos una cuadricula con rotulador permanente, la misma que hicimos en el papel de dibujo, aunque esta vez con lápiz para posteriormente borrarla y escogimos un lugar de la facultad para dibujarlo.
Al dibujar con cuadrícula hay que estar más concentrado, ya que no te puedes perder en el dibujo. Cada punto es una ralla, curva...
El tiempo que nos dio se paso rapidísimo.
Este fue mi resultado:

Habiendo dibujado espacios amplios e exteriores, nos centramos en dibujar la cara de un compañero.
Ángel hizo una demostración en la pizarra, y parecía muy fácil, pero la realidad no fue así.
Esto me resulto más complicado de lo que pensaba, porque aunque intente hacerlo igual no salia.
EL paisaje anterior al tener más formas rectas no me costo tanto como el rostro de una persona.
Fue una clase divertida ya que el ver al realidad con tu dibujo, tenia gracia.
Marque las facciones con sombras e intente hacerlo como Ángel nos había explicado.
El retrato que hice fue de mi compañero Sergio:

La clase siguiente del retrato con la cuadrícula, realizamos otro, pero esta vez sin cuadricula, simplemente a mano alzada. Una compañera poso mientras un grupo realizamos el dibujo.

                    

Aunque aquí me he dado cuenta de que con la cuadrícula sale mejor los retratos:

Dibujar ha sido una experiencia muy satisfactoria, ya que me he dado cuenta de que algunas veces parece cualquier cosa fácil de dibujar y después no lo es tanto. Cada dibujo nunca va a ser igual que el de otra persona.